EL PASO SAN FRANCISCO ABANDONADO! DESIDIA E INACCIÓN DEL GOBIERNO PROVINCIAL EXPONEN EL COLAPSO TOTAL EN LA FRONTERA

En un escenario alarmante que pone en evidencia la ineficacia y desinterés de las autoridades provinciales, se ha oficializado la salida de varios funcionarios clave del Ministerio de Integración Regional, Logística y Transporte. Este cambio, lejos de ser una solución, revela una preocupante situación que se ha gestado durante meses en el Paso San Francisco, uno de los puntos fronterizos más importantes para la conexión internacional entre Argentina y Chile. Mientras se realizan cambios cosméticos en la estructura gubernamental, los problemas estructurales y logísticos de la región siguen sin resolverse, afectando tanto a los trabajadores del Paso como a la población que depende de su correcto funcionamiento para mantener el flujo comercial y de tránsito entre ambos países.

La gestión fallida de Héctor Tejerina: una postal de abandono

Entre los funcionarios removidos se encuentra Héctor Tejerina, exdirector Provincial de Coordinación Estratégica y Operativa del Paso San Francisco. Su gestión, que duró nueve meses, se caracterizó por la inacción y la falta de respuestas ante los problemas más básicos. Los refugios del Paso están inundados de basura, convirtiéndose en una triste postal diaria. La situación de los trabajadores es aún más grave: el personal de Gendarmería, Migraciones, Aduana, Senasa y otras instituciones que operan en la zona no cuenta con baños sanitarios adecuados debido al colapso del sistema cloacal, lo que ha provocado una crisis de salubridad. Durante su gestión, Tejerina fue incapaz de resolver este problema ni siquiera enviando un camión atmosférico para desagotar el sistema. Esta inacción ha sumido a los trabajadores en condiciones indignas y ha afectado directamente el funcionamiento del Paso.

¿Dónde estaban las autoridades provinciales?

Lo más indignante de esta situación es que el problema no fue solucionado por el gobierno provincial, que debería haber intervenido de inmediato para garantizar las condiciones mínimas de trabajo y salubridad en el Paso San Francisco. En su lugar, la gestión para resolver esta crisis fue encabezada por Jairo Reales, funcionario local, quien, con el apoyo de la Municipalidad de Fiambalá y la intervención de Soledad García, encargada del Paso a nivel nacional, logró movilizar los recursos necesarios para comenzar a solucionar el colapso sanitario. Esto deja en evidencia la total falta de interés y compromiso del ministro de Integración Regional, Logística y Transporte, Eduardo Andrada, quien, a pesar de ser responsable directo de la operación del Paso, permitió que la situación llegara a un punto crítico sin tomar medidas concretas para resolver los problemas estructurales. La inacción no solo agravó la crisis, sino que también afectó a todos los sectores que dependen de la operatividad del Paso, tanto a nivel comercial como turístico.

El silencio cómplice del senador Alaníz

La indignación no termina con la inacción de Andrada y su equipo, sino que también recae sobre el senador provincial por el Departamento de Tinogasta, Dr. José "Nony" Alaníz, cuyo silencio y ausencia en esta problemática son inaceptables. En sus años como legislador, Alaníz ha brillado por su ausencia en el interior departamental, generando un profundo malestar entre los pobladores, quienes se preguntan: ¿qué ha hecho el senador por la región? Jamás se lo ha visto recorrer el departamento para conocer las necesidades de las comunidades ni se ha puesto a disposición de las mismas.

En el caso específico del Paso San Francisco, su desinterés ha sido evidente. No solo ha ignorado las problemáticas que enfrenta esta zona estratégica, sino que también ha sido incapaz de promover iniciativas que garanticen su correcto funcionamiento y preservación. La cordillera y el Paso, áreas que requieren un cuidado especial por su importancia geopolítica y ambiental, han sido literalmente abandonadas. Las necesidades de infraestructura y servicios en el Paso han sido ignoradas sistemáticamente, y Alaníz ha fallado en su rol de representante del pueblo de Tinogasta, quedando al margen de una de las crisis más graves de la región.

El abandono total del personal de Flora y Fauna: la cordillera como tierra de nadie

Otro aspecto igualmente preocupante es la situación del personal de Flora y Fauna, encargados de proteger la biodiversidad de la cordillera. Estos trabajadores, que deberían contar con el respaldo del gobierno provincial para preservar los recursos naturales de la región, se encuentran en total desamparo. No tienen vehículos para realizar sus tareas, carecen de uniformes y no disponen de ningún recurso que les permita cumplir con sus funciones de manera efectiva. En palabras de los propios habitantes de Fiambalá, éstos  trabajadores, "no tienen nada". Esta falta de apoyo no solo compromete la conservación de la fauna y flora de la cordillera, sino que también convierte a la región en una "tierra de nadie", donde la ausencia del Estado Provincial es palpable e indiscutible.

Una gestión que falla en su deber

Este cúmulo de negligencias y abandonos deja al descubierto una gestión provincial completamente desconectada de las necesidades del pueblo. Los recientes cambios de gabinete en el Ministerio de Integración Regional, Logística y Transporte, anunciados por Eduardo Andrada, no pueden ser más que una pantalla para ocultar la falta de acción concreta frente a los problemas que aquejan a Fiambalá y toda la región de la cordillera. Mientras los funcionarios cambian de nombre, las problemáticas siguen sin resolverse, y el abandono estatal del gobierno de Raúl Jalil, persiste.

La pregunta que surge en la comunidad es clara: ¿cuánto tiempo más permitirán las autoridades provinciales que esta desidia continúe? ¿Cuánto más podrán ignorar las necesidades de la gente, los trabajadores y las instituciones que operan en zonas tan vitales como el Paso San Francisco? La paciencia de la población se agota, y el pueblo exige respuestas y acciones concretas, no solo cambios de nombre en un gabinete que ha fallado en cumplir con su deber.

(Ver Galería de Fotos)